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Lesiones en fútbol ¿Cuáles son las más comunes?

Analizamos las lesiones en fútbol más comunes, diferenciando entre lesiones en el fútbol profesional, lesiones en el fútbol amateur y lesiones en el fútbol base.

INTRODUCCIÓN

Desafortunadamente, el fútbol, presenta altas tasas de lesión a nivel profesional, amateur y juvenil (1). Teniendo en cuenta que las lesiones en fútbol resultan de una interacción compleja de múltiples factores de riesgo intrínsecos y extrínsecos (2) y que es inevitable su aparición, la posibilidad de reducir el riesgo de lesión es importante tanto para el jugador como para el cuerpo técnico, no solo para la protección de la salud física y psicológica del deportista, sino también para beneficios más amplios como un mejor rendimiento del equipo (3). 

Pero la lesión deportiva no repercute únicamente en la salud y en el rendimiento inmediato del deportista y del equipo, también repercute en el proceso de enseñanza-aprendizaje (4) y genera grandes pérdidas económicas al club (5); teniendo en cuenta que a nivel profesional el costo promedio de un jugador lesionado durante un mes es de aproximadamente 500.000 euros (6), evitar lesiones y mantener a los jugadores en un óptimo nivel de rendimiento en el campo es fundamental (7)

Para abordar una buena estrategia de reducción de lesiones, primero debemos de conocer la epidemiología lesional del contexto en el que estamos trabajando, es por ello que en el siguiente artículo se hablará de cuáles son las principales diferencias en la epidemiología lesional del fútbol profesional, amateur y juvenil.

FUTBOL PROFESIONAL

En un reciente meta-análisis se indica que la incidencia de lesión es de 8,1 por 1000 horas de exposición y que la incidencia de lesiones en los partidos es notablemente más alta respecto a la obtenida durante los entrenamientos, casi 10 veces más (8), debido a una mayor demanda física, mayor número de contactos y colisiones, mayor incertidumbre, variabilidad y una mayor fatiga generada durante el partido. El riesgo de lesión aumenta en la última mitad de cada parte (8), en la segunda mitad de la temporada (9) y cuando los partidos están separados <5días (10)

El ratio de lesiones musculares aumenta durante el período competitivo (Septiembre-Mayo), respecto al período pre-competitivo (Julio-Agosto), exceptuando el complejo del cuádriceps (11). 

Se estima que un equipo profesional de 25 jugadores enfrentará aproximadamente 50 lesiones con pérdida de tiempo cada temporada (12) , lo cual equivale a 2 lesiones por jugador. De esas 50 lesiones, 15 son lesiones musculares, es decir un 31% de todas las lesiones. El 92% de las lesiones musculares afectan a las extremidades inferiores: 37% isquiotibiales, 23% aductores, 19% cuádriceps y 13% pantorrilla (13). 

La ubicación más común en el fútbol profesional es el muslo, generalmente afecta al isquiotibial (17% de todas las lesiones), el segundo lugar más afectado es la rodilla (LCA, esguince de rodilla, rotura de menisco…), en tercer lugar la cadera e ingle (pubalgia) y por último el tobillo (el 90% son esguinces) (14)

La mayoría de las lesiones son leves (contusiones, lesiones en las articulaciones y dolor en extremidades inferiores), con una ausencia de 7 días o menos, pero hay que tener en cuenta que las lesiones moderadas (lesiones estructurales en cuádriceps, pantorrilla e isquiotibial, dolor en aductor-ingle y lesiones en el ligamento colateral medial de la rodilla y lateral del tobillo), suponen una ausencia de 8 a 28 días y representan el 60% de todas las ausencias. En contraposición, las lesiones graves (ruptura de LCA y menisco lateral), con ausencia mayor a 28 días, son bastante infrecuentes, representado un 1-2% (15)

Por último, cabe destacar que el tiempo de recuperación después de una lesión recurrente es significativamente mayor respecto a las lesiones índice, sobre todo en: isquiotibiales, tendón de Aquiles, cuádriceps, pantorrilla y aductor-ingle, destacando la importancia de evitar recaídas (15)

Respecto al fútbol femenino podemos destacar que los patrones de lesiones son muy similares, pero las mujeres sufren más lesiones de rodilla, teniendo dos o tres veces mayor riesgo de lesión de LCA a una edad más temprana y teniendo un mayor riesgo de lesiones durante el partido, sin embargo los jugadores masculinos sufren más lesiones en la región inguinal (16), por ello es muy importante poner énfasis en la prevención de lesiones de LCA en el fútbol femenino.

FÚTBOL AMATEUR

La incidencia lesional por 1000h de exposición durante las sesiones de entrenamiento, son mayores a nivel aficionado respecto al profesional. Por el contrario, durante los partidos, es significativamente mayor a nivel profesional (2)

Por otro lado, también se encontró que los jugadores amateurs tenían un 64% más de lesiones significativamente graves (>28 días) y con un mayor número de recurrencia lesional que los jugadores profesionales (2).

Existe una relación inversa en lesiones recurrentes a medida que aumenta el nivel deportivo, un 50% mayor para jugadores “amateur” respecto a jugadores “UEFA-ECIS”. Un aspecto a destacar es que en la segunda mitad de la temporada aumentó para todas las cohortes, una explicación podría ser que el cuerpo técnico permite que los jugadores lesionados se sometan a un riesgo mayor de lesión para jugar partidos importantes (9).

La incidencia total (lesiones / 1000h) es un tercio menor en jugadores amateurs pero tienen una menor exposición (9).

Se puede concluir que los jugadores amateurs tienen una mayor tasa de incidencia basada en menos exposición y que son más propensos a lesiones recurrentes. Estas características pueden ser debido a un menor nivel de experiencia, menor adquisición de habilidades relevantes para evitar acciones propensas a lesiones, tamaño del equipo, soporte médico más limitado, rehabilitación menos óptima, condiciones del campo, intensidad del juego…

FÚTBOL JUVENIL

A nivel infanto-juvenil, estas lesiones repercuten sobre el desarrollo y el bienestar de los jugadores, sobre el proceso de enseñanza-aprendizaje y el rendimiento inmediato y futuro (4)

En base a una revisión actual sobre las lesiones en jóvenes futbolistas  podemos destacar que:

  • La probabilidad de tener una lesión varía mucho en función de los estudios, siendo la edad comprendida entre 9-13 años la que menos probabilidades tenía (1% – 39%) respecto a los rangos de edad de 14-16 años (13% – 96%) y 18 – <21 años (23% – 85%)
  • La incidencia lesional es menor que a nivel profesional. A nivel global, la incidencia es de 5,8 por 1000h de exposición, siendo mayor en la edad comprendida de 17 a 21 años (7,9/1000h) respecto a 9 – 16 años (3,7/1000h)
  • Al igual que en el nivel profesional, los entrenamientos se asociaron con tasas más bajas de lesiones en comparación con los partidos, la tasa de lesión en los entrenamientos en edades de 18 – <21 años fue más alta (4,3 – 5,8 / 1000h) comparable con las tasas de futbolistas profesionales. Pero, debemos de tener en cuenta que el índice lesional es mayor en los partidos juveniles frente a los profesionales.
  • Respecto a la ubicación, las lesiones en las extremidades inferiores son las más comunes, destacando el tobillo, la rodilla y cadera-ingle.
  • Las lesiones musculares oscilaron entre un 27% – 37%, datos similares a los encontrados en jugadores profesionales (31%) y sobre todo en la zona cadera-ingle y muslo (cuádriceps-isquiotibiales)
  • Los mecanismos lesivos más comunes fueron: correr y los contactos (66%).
  • Las lesiones graves (>28 días) representaron un cuarto de todas las lesiones. Esto representa una pérdida significativa de tiempo afectando a su rendimiento físico y psicológico, educación, competencia…

Existe una alta probabilidad de sufrir una lesión por “pérdida de tiempo” durante una temporada en futbolistas infanto-juveniles, esto hace que los jugadores sufran largas ausencias en entrenamientos y partidos, perdiendo su potencial desarrollo a nivel técnico, táctico, físico y psicológico; a su vez, esto repercute en la salud, el bienestar y en la economía de los padres y el club.

REFERENCIAS

1.        Pfirrmann D, Herbst M, Ingelfinger P, Simon P, Tug S. Analysis of injury incidences in male professional adult and elite youth soccer players: A systematic review. J Athl Train. 2016;51(5):410–24. 

2.        Anne-Marie van Beijsterveldt AMC, Stubbe JH, Schmikli SL, Van De Port IGL, Backx FJG. Differences in injury risk and characteristics between Dutch amateur and professional soccer players. J Sci Med Sport [Internet]. 2015;18(2):145–9. Available from: http://dx.doi.org/10.1016/j.jsams.2014.02.004

3.        Fortington L V., van der Worp H, van den Akker-Scheek I, Finch CF. Reporting Multiple Individual Injuries in Studies of Team Ball Sports: A Systematic Review of Current Practice. Sport Med. 2017;47(6):1103–22. 

4.        Jones S, Almousa S, Gibb A, Allamby N, Mullen R, Andersen TE, et al. Injury Incidence, Prevalence and Severity in High-Level Male Youth Football: A Systematic Review. Sport Med [Internet]. 2019;49(12):1879–99. Available from: https://doi.org/10.1007/s40279-019-01169-8

5.        Nouni-Garcia R, Asensio-Garcia MR, Orozco-Beltran D, Lopez-Pineda A, Gil-Guillen VF, Quesada JA, et al. The FIFA 11 programme reduces the costs associated with ankle and hamstring injuries in amateur Spanish football players: A retrospective cohort study. Eur J Sport Sci [Internet]. 2019;19(8):1150–6. Available from: https://doi.org/10.1080/17461391.2019.1577495

6.        Ekstrand J. Keeping your top players on the pitch: The key to football medicine at a professional level. Br J Sports Med. 2013;47(12):723–4. 

7.        Hallén A, Ekstrand J. Return to play following muscle injuries in professional footballers. J Sports Sci [Internet]. 2014;32(13):1229–36. Available from: http://dx.doi.org/10.1080/02640414.2014.905695

8.        López-Valenciano A, Ruiz-Pérez I, Garcia-Gómez A, Vera-Garcia FJ, De Ste Croix M, Myer GD, et al. Epidemiology of injuries in professional football: A systematic review and meta-analysis. Br J Sports Med. 2019;1–9. 

9.        Hägglund M, Waldén M, Ekstrand J. Injury recurrence is lower at the highest professional football level than at national and amateur levels: Does sports medicine and sports physiotherapy deliver? Br J Sports Med. 2016;50(12):751–8. 

10.      Bengtsson H, Ekstrand J, Waldén M, Hägglund M. Muscle injury rate in professional football is higher in matches played within 5 days since the previous match: A 14-year prospective study with more than 130 000 match observations. Br J Sports Med. 2018;52(17):1116–22. 

11.      Hägglund M, Waldén M, Ekstrand J. Risk factors for lower extremity muscle injury in professional soccer: The UEFA injury study. Am J Sports Med. 2013;41(2):327–35. 

12.      Waldén M, Hägglund M, Bengtsson H, Ekstrand J. Perspectives in football medicine. Unfallchirurg. 2018;121(6):470–4. 

13.      Mueller-Wohlfahrt HW, Haensel L, Mithoefer K, Ekstrand J, English B, McNally S, et al. Terminology and classification of muscle injuries in sport: The Munich consensus statement. Br J Sports Med. 2013;47(6):342–50. 

14.      Eirale C, Ekstrand J. Epidemiology of injury in football. Aspetar Sport Med J. 2013;2:144–9. 

15.      Ekstrand J, Krutsch W, Spreco A, Van Zoest W, Roberts C, Meyer T, et al. Time before return to play for the most common injuries in professional football: A 16-year follow-up of the UEFA Elite Club Injury Study. Br J Sports Med. 2019;1–6. 

16.      Niek Van Dijk C, Neyret P, Cohen M, Stefano ·, Villa D, Pereira H, et al. Injuries and health problems in football. Springer N. Espregueira-Mendes J, editor. Berlin, Germany; 2017. 703 p.